El combate. Norman Mailer
- Тип: Текст
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- Издательство: Bookwire(2020)
- ISBN: 9788418282171
- Страниц: 305
- Язык: Испанский
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El 30 de octubre de 1974 tuvo lugar en el Estadio 20 de Mayo de Kinshasa, Zaire (hoy Rep?blica Democr?tica del Congo), uno de los combates de boxeo m?s c?lebres de la historia del pugilismo. Enfrent? al vigente campe?n de los pesos pesados, George Foreman, un p?gil de una agresividad e instinto asesino sin parang?n, y al que probablemente fue el m?s grande boxeador de todos los tiempos y un icono del siglo XX, Cassius Clay, rebautizado como Muhammad Al?. Norman Mailer, padre del Nuevo Periodismo y una de las voces m?s poderosas de la literatura norteamericana de la segunda mitad del siglo pasado, relata con maestr?a el enfrentamiento que se disput? en el seno del imperio africano del feroz y megal?mano dictador Mobutu, en pleno «coraz?n de las tinieblas», que Joseph Conrad inmortaliz? en su novela. Mailer, en calidad de reportero, asiste a los preparativos del combate, lo que le permite ser testigo de excepci?n de los duros entrenamientos y retratar al s?quito de exc?ntricos entrenadores y sparrings que acompa?a a los p?giles, incluido al promotor en ciernes Don King y a otros reporteros desplazados como George Plimpton o Hunter S. Thompson. Pero, sobre todo, Mailer logra establecer una relaci?n de proximidad tanto con Foreman como con Al? y conocer de primera mano las tensiones, miedos y anhelos que laten en su interior. El combate es tambi?n el del propio Mailer con la literatura, el de un escritor ambicioso que, con su inconfundible estilo armado de barrocas met?foras y un humor visceral e insobornable, lucha por hacer el retrato definitivo de un combate de boxeo; tanto de las dudas, flaquezas y arrogancia desmedida de sus protagonistas, como de la dureza e intensidad de la pelea que dej? a ambos p?giles al borde de la extenuaci?n, as? como del entorno de excepci?n en el que se disput? el combate un Zaire depauperado de tradiciones ancestrales en el que irrumpe el opulento despliegue medi?tico que cubre el evento, dando rienda suelta a su incombustible y pol?mica mirada presidida por un ego apenas superado por el de Muhammad Al?.
